EL HOMENAJE A BASILIO EXPOCITO EN OFI.

Se realiza un minuto de silencio por el reciente fallecimiento del Sr. Basilio Expócito, compañero integrante del Consejo Ejecutivo de la Organización.

También se realiza un voto de aplauso en su memoria.

El Sr. Bares dice que perdimos uno de los pocos “cable a tierra” que tenía el Ejecutivo. Cuando había discrepancias siempre trataba de mediar y buscar soluciones. Siempre con buena voluntad. Recorrió, trabajando para el Ejecutivo, muchos lugares de nuestro interior. Recuerda que, pocos días antes de su fallecimiento, tuvieron la oportunidad de festejarle sus 70 años.

El Sr. Román dice que hacía más de 20 años que conocía a Basilio. En el período anterior fueron compañeros del Ejecutivo. Dice que fue un gran amigo, gran tipo. Pide que Dios lo tenga en la gloria.

El Sr. Gómez dice que lamenta no haber podido estar en el sepelio. Dice que estuvo poco tiempo compartiendo con Basilio. Igual pudo aquilatar la persona que era. Siempre pausado, tranquilo. Dice que es una gran pérdida.

El Sr. Vigneaux dice que era un tipo excelente. Recuerda que compartió con el grupo hasta el último martes. Pide que Dios lo tenga en la gloria y que en paz descanse. El Sr. Larrosa dice que se siente muy mal por su pérdida. Lo conocía desde hace más de 20 años. Siempre compartiendo reuniones. Recuerda que, por un mal entendido, se había alejado del Consejo. Personalmente propuso que se reintegrara como consejero del Este. Manda un saludo a la familia, la que sin duda es la que más sufre esta pérdida.

El Sr. Gabito adhiere a los conceptos que se desarrollaron. Dice que tuvo oportunidad de decirlos en la Confederación del Este, donde se había cometido una gran equivocación. Por suerte se reintegró. En el Ejecutivo se encontró con la gran persona y el gran trabajador. Recuerda a su familia.

El Sr. Candamil se suma a los conceptos que se dijeron en sala sobre Basilio. Dice que lo trató poco tiempo pero con gran intensidad. Se trató de un gran compañero. El Sr. Mosegui dice que le tocó recibir la llamada del hijo desde el celular de Basilio, dando la noticia ingrata.

Recuerda que el martes pasado, cuando terminó la reunión del Ejecutivo (que sin dudas no fue de la mejores), se sentía mal por lo que no fue a Florida. Dice que recibió un rezongo de Basilio. Rezongo de amigo. Le dijo que no se puede venir a pasar mal. Es la palabra de esa persona mayor. Un gran consejo para aplicar en la vida. Se trata de no irse enojado. Piensa seguir ese consejo. Pide a los compañeros que tengan en cuenta esa lección de vida.

El Mtro. Mernies dice que lamenta no haber podido despedirse. Dice que lo conoció este año. Pero era del tipo de persona que no se precisa mucho tiempo para darse cuenta de su forma de ser. Siempre una palabra justa. Aconsejaba desde su experiencia y desde su hombría de bien. Envía sus condolencias a los familiares que deben estar sufriendo la pérdida.

El Sr. Alfonso dice que lo conoció hace algunos años. Dice que se fue un gran compañero. El Dr. Bermúdez dice que lo conoció hace poco. Pero en este poco tiempo supo que era la persona mayor que brindaba su experiencia en forma generosa. Era lo voz que sirve; la necesidad de bajar un cambio en las discusiones. Para todos, sin distingos. Siempre tratando de buscar soluciones.

La muestra de lo que era estuvo en el velatorio donde, rodeado de familiares y amigos, las manifestaciones de dolor y reconocimiento eran variadas y desde las distintas actividades que desempeñó Basilio.

El Cr. Segura expresa su dolor por la pérdida de un hombre, al que conocía desde hace mucho tiempo, que estaba rodeado de muchas virtudes. Era una persona muy querible porque siempre estaba dispuesto a colaborar, a aconsejar, poniéndose siempre a la par de los demás, cargando siempre buen humor. Trabajando con él nunca sintió que se “pusiera” en consejero.

La demostración del afecto que recogía estuvo demostrada en que varios compañeros del Ejecutivo anterior viajaron desde muy lejos para despedir al amigo. Dice que, en charla con la viuda, le manifestó el sentir de que esta pérdida no tiene consuelo. En todo caso, con el paso del tiempo, va a ir apareciendo la imagen de Basilio que, reflejando su bonhomía, nos traerá los mejores recuerdos. Hasta siempre, Basilio.

El Sr. Márquez dice que capaz que lo siente más porque siempre volvían juntos. Dice que trabaron una amistad muy importan-te. Dice que hablaba mucho de su familia. Era una persona integra. De perfil bajo. Gran persona. Recuerda que cultivó amistad con todos sus compañeros. Sabía que se reunía con los compañeros del anterior Ejecutivo.

Dice que el martes pasado quedó preocupado porque no lo encontraba bien.

La llamada del hijo lo dejó impactado. Dice que son las cosas de la vida.

Pide hacer votos para que Basilio esté en un lugar de privilegio.

Anuncia que, en poco tiempo, se le hará un homenaje.

El Sr. Brum dice estar muy emocionado por el amigo. Dice que aprendió a quererlo. Opina que lo que nos queda es la amistad. Querer al compañero y respetarlo. Dice que le toca mucho porque fueron compañeros de viaje en varias ocasiones. Paraban uno en la casa del otro, y viceversa.

Dice que lo va a tener siempre en la memoria.

Opina que la lección de todo esto es que se debe discutir todo pero que luego quede la amistad. Dice que agradece haber compartido. Con Basilio y con todos. El Sr. García dice que se le viene a la memoria una final realizada en Melo. En esa ocasión tuvo la oportunidad de conversar largamente con él. Dice que compartían algunas cosas por sus respectivos pasados en el ámbito militar. Que tenían muchos amigos comunes.

Dice que muchas veces, en la discusión, nos “calentamos” con estupideces y recibir estas noticias nos enseña que lo importante es otra cosa.